“La atmósfera resplandeciente dificultaba la visión, y sólo una vez que se había puesto el sol mis ojos errantes pudieron detenerse en el risco más alto del islote principal para advertir algo que flotaba, solemne, en la perfecta soledad. La marea de las sombras crecía lentamente; y de pronto, como sucede en el trópico, un enjambre de estrellas investigó la tierra tenebrosa, mientras yo, que sequía contemplando, apoyaba la mano en la batayola como si del hombro de un amigo se tratara. Pero, al sentirme observado por esa multitud de astros, mi entrañable y serena unión con la nave se disipó. Al mismo tiempo empezaron a sonar rumores molestos, voces y pasos; el mayordomo, hombre de espíritu afanoso y muy solícito, apareció en el puente principal; una campanilla tintineó a popa, apremiante.”  

Galería Karen Huber se complace en presentar, Personal Analysis, segunda exposición individual de Marc Breslin (Nueva York, EE.UU, 1983). Breslin continúa su investigación en torno al espacio y al tiempo a través de una serie de pinturas que buscan crear una inmersión en nuestras relaciones compartidas con el paisaje y con la interioridad, no solo de nuestro espacio físico sino también de las arenas mentales de la psique. Después de cinco años de haber visitado el Salar de Uyuni en Bolivia, Breslin nos lleva de vuelta a ese lugar de apariencia surrealista pero tan real como cualquier otro. En cada obra los personajes se encuentran con ellos mismo y sus territorios reflejados  - una metáfora de la vidas que todos vivimos: nuestra persona íntima confrontándose con la otra pública; el escuchar nuestra voz interna en una conversación frente a la extrañeza de oírla en una grabación. Poniendo al espectador en diálogo con estas pinturas, esos personajes solitarios y paisajes encuentran esperanza en una existencia compartida.